El proceso productivo comprende las fases de preparación del terreno y extracción del recurso, en condiciones de máxima estabilidad y seguridad. Para ello se recurre a la utilización de una máquina excavadora para las tareas de canalización, limpieza de la superficie, ...
Seguidamente, el material extraído será exfoliado para alcanzar el grosor y el tamaño adecuados para que el producto sea vendible; no se le aplica ningún tipo de tratamiento artificial.
El material, una vez clasificado por tamaños y/o colorido, se coloca en paletas y es transportado hasta el almacén o taller de serrado donde está a disposición de los clientes.